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EDITORIAL
Contribuyamos a disminuir
los siniestros viales en Colombia
Lamentablemente cada año se
reportan en Colombia miles de muertos a causa de accidentes de
tránsito, un flagelo que cada vez va en aumento y que no se ha
logrado detener pese a las campañas viales que ejecutan los
integrantes que son miembros de la policía de carreteras.
El problema de esta alta cifra de fallecidos por accidentes es
la consecuencia de una serie de falencias que vivimos en nuestro
país empezando a mencionar por ejemplo que esta campaña de
prevención vial realmente es insuficiente para la cobertura de
conductores que cuenta el país ya que se realizan de manera muy
esporádica.
Las causas de la accidentalidad en Colombia van mucho más allá
de la realización de campañas viales, la mayor causa de los
accidentes viales, además de la imprudencia de los conductores
es el mal estado de los vehículos que transitan por las vías
rápidas del país, especialmente los colectivos de transporte.
Esta situación sucede porque los dueños y administradores de los
buses son corruptos y prefieren ahorrarse el dinero que bien
podrían invertir en una revisión tecno mecánica de los mismos de
manera más constante, teniendo en cuenta que han sido varias las
víctimas de accidentes fatales que han indicado que los
conductores de estos vehículos han perdido el control al volante
por fallas mecánicas.
Incluso otras denuncias indican que en el país todavía se
encuentran circulando buses de los años 60 y 70 y que desde hace
rato cumplieron su vida útil pero aun así siguen funcionando y
transportando a cientos de colombianos, quienes desconocen esta
situación y se transportan en este vehículo sin saber que corren
un alto riesgo.
Esta problemática se agudiza cada vez más a sabiendas que frente
a este asunto ha sido muy poca la gestión que el Estado ha
realizado para controlar este tema en Colombia, es más ni
siquiera ha existido una ley que evite la circulación de estos
vehículos ni tampoco se controla con rigurosidad la constante
revisión tecno mecánica de vehículos.
Además de ocasionar graves accidentes, estos vehículos que ya
cumplieron su vida útil también están ocasionando serios daños a
la naturaleza con la contaminación de humo que generan, motivo
por el cual se hace necesario que se ejerzan más controles para
sacarlos de circulación.
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Mi país del tinto # 7
“Personajes que evocan nuestro pasado es recuperar nuestras
raíces. Una opinión con perspectiva literaria y visionaria del
pasado de Pereira”
Por:
Rubén Darío Varela
Alto y muy
delgado, demasiado crespo y sentado montando “carrizo” como se
dice coloquialmente y luciendo un sombrero color habano, casi
siempre con un paquete de cigarrillos a un lado de la silla
donde se sienta en la esquina de la carrera 9 con calle 18 en el
centro de la ciudad de Pereira, así es la imagen que desde hace
algunos años tengo en mi memoria de don Evelio.
Y
es que a pesar del transcurrir implacable del tiempo y pese a la
transformación de nuestra vida con la llegada de la tecnología;
don Evelio sigue en pie de lucha en la esquina de la carrera 9ª.
con calle 18 vendiendo las fichas de los álbumes de chocolatinas
Jet, los mundiales de fútbol, incluso de la época en la que
jugaba Pelé y Maradona.
Aún
recuerdo hace años la época dorada de la adolescencia en la que
en compañía de mis amigos del barrio, Carlos, Santiago y Matías
solíamos acudir a donde don Evelio para conseguir las fichas más
difíciles del álbum de chocolatinas porque estábamos seguros que
él los tenía todos, absolutamente todos los caramelos que hacían
falta para llenar cualquier álbum de la época.
Años después don Evelio, o el “novio de ella” como a veces le
digo porque así le dice ala balota 66 en algunas ocasiones que
me los he encontrado en el Bingo del Lago, aún conserva su
maleta negra, grande y ya un poco descolorida donde guarda con
cautela caramelos de todos los tamaños, colores y épocas.
“Estoy desde el 81, y tengo todas las fichas desde el mundial de
México 1978 cuando Argentina se consagró campeón del mundo, y
del álbum de chocolatinas Jet tengo desde el año de 1.968”, me
decía don Aurelio mientras atendía a una señora justo antier que
pasaba por ahí y mientras buscaba comprendí que él, aunque no lo
sepa es todo un protagonista de la preservación de la memoria de
un pueblo, de una Pereira antigua que don Aurelio me recuerda
mucho.
Personajes en mi
país del tinto
Traigo a
colación la historia de don Evelio en esta columna de opinión
salida de todo contexto, precisamente porque considero que este
tipo de personajes, así como muchos de este estilo que podemos
encontrar en “MI PAÍS DEL TINTO”, son importantes de visualizar,
porque son ellos, quienes nos retroceden en el tiempo, la
historia y nos reflejan nuestros orígenes, la idiosincrasia de
nuestro pasado y las costumbres aquellas indestructibles a pesar
del auge de la tecnología que estamos viviendo.
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Crónica de
Gardeazábal # 488
EL RIDÍCULO SUBLIME
Por: Gustavo
Alvarez Gardeazábal
Audio: https://www.spreaker.com/episode/51115632
Roy Barreras es hoy por hoy el vallecaucano con más poder en la
nación. Como es el mandacallar de este gobierno, aún por encima
del ministro de Defensa, que parece ser el cerebro maquiavélico
de todo el engranaje organizado y con metas previstas del
petrismo.
Como Roy identifica muy bien el poder que significa ser el
presidente del Senado. Y como también dio muestras de su
espíritu de saltimbanqui escapando casi que milagrosamente del
enredo de los petrovideos de la campaña y ninguna sospecha cayó
sobre la posibilidad de que hubiese sido el mensajero soplón,
pero sobre todo porque es a él a quien sin duda alguna en
últimas se le responsabiliza de mover los hilos del gobierno y
el Congreso a más de estár encargado de revisar las hojas de
vida de quienes nombran y, en especial, de ser tan consueta del
presidente Petro como médico acupunturista de las enfermedades
inventadas o ciertas que el vulgo ha resuelto acomodarle al
primer mandatario.
Por todo ello, ha terminado encumbrándose en su poderío. Pero
aún así, su estilito de sabandija para pasar de un bando al
otro, honrar y servir de turiferario de un presidente y después
de otro bien diferente, lo lleva a mantener una actitud posuda
muy identificable y a cometer ligerezas que donde existiera
Moliére, ya lo habrían llevado a las tablas teatrales como el
sublime ridículo.
El culmen de esa manía posuda lo pudo apreciar el país entero
cuando el Congreso en pleno eligió a Carlos Hernán Rodríguez
como Contralor. Apenas se dio el resultado de la elección, Roy
con una premura más prostática que inteligente, cogió cortico-cortico
al mesurado Contralor y delante de todas las cámaras de los
medios noticiosos le tomó posesión y juramento.
Por supuesto que lo hizo saltándose la ley que obligaba a que el
Contralor tomará posesión ante el presidente de la nación, como
efectivamente lo tuvo que hacer al comienzo de esta semana.
Obviamente el que Carlos Hernán Rodríguez haya jurado dos veces
para el mismo cargo no es un delito pero si un pleonasmo.
Pero que no haya habido quien se burle del afán de Roy de
hacerlo jurar y posesionarlo indica que la escuela que montamos
con Peláez en La Luciérnaga ya no existe ni en los medios
noticiosos serios ni en los espacios donde el rumor se vuelve
una carcajada. Después de este sublime ridículo, tan grande como
el silencio de quienes no se atreven a criticar al nuevo
gobierno, estamos obligados a pensar que de Roy se puede esperar
cualquier cosa. ¡Ténganle cuidado!
El Porce, septiembre
2 del 2022
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