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Orquestas regionales
en crisis: El recorte presupuestal que pone en jaque la música sinfónica
en Colombia

El sector cultural en Colombia
enfrenta un nuevo desafío. A pesar de que el Ministerio de Cultura
recibió en 2024 el presupuesto más alto de su historia, la inversión en
el fortalecimiento de las orquestas regionales ha sufrido un duro golpe
con un recorte inesperado del 30 %. La noticia ha generado una gran
preocupación entre músicos, directivos y amantes de la música sinfónica,
quienes advierten sobre las graves consecuencias culturales que podría
traer esta decisión.
Un presupuesto récord, pero con menos inversión
El año pasado, el Ministerio de Cultura administró un presupuesto de
1,32 billones de pesos, una cifra histórica que prometía consolidar la
cultura como uno de los pilares del Gobierno Nacional. Parte de esos
recursos fueron destinados al programa ‘Sonidos para la Construcción de
Paz’, con una inversión de 360.000 millones de pesos, beneficiando a más
de 300.000 estudiantes en el país, incluyendo a personas privadas de la
libertad y docentes formadores.
Sin embargo, en 2024 no se estableció
una estrategia clara para fortalecer la base musical preexistente en el
país. Y aunque para 2025 el presupuesto se mantuvo alto con 1,09
billones de pesos, el sorpresivo recorte en el área de la música
sinfónica ha generado incertidumbre y preocupación en el sector.
Las orquestas alzan la voz
El pasado 11 de febrero, Jorge Enrique Sossa Santos, coordinador de
músicas del Ministerio de Cultura, anunció la reducción del 30 % en los
recursos destinados a la música sinfónica. La noticia llevó a que varias
orquestas reconocidas, entre ellas la Filarmónica de Medellín y la
Sinfónica de Caldas, emitieran una carta expresando su descontento y
advirtiendo sobre las implicaciones del recorte.
Según el documento, la disminución en el presupuesto podría derivar en
el cierre de cinco de las siete orquestas profesionales del país en los
próximos dos años. Además, más de 500 músicos sinfónicos verían
afectados sus ingresos, poniendo en riesgo la estabilidad laboral de
quienes dependen de estas agrupaciones para su sustento.
Pero el impacto no se limita solo a los músicos. Se estima que alrededor
de 6.000 niños y sus familias podrían perder el acceso a conciertos
didácticos y programas culturales. Además, cerca de 100.000 personas se
quedarían sin acceso a la música sinfónica y a eventos de fusión
orquestal en espacios públicos. La reducción presupuestal también
afectaría la cadena de valor del sector, perjudicando a compositores,
técnicos de sonido, escenógrafos y otros trabajadores de la industria
cultural.
El fin de un programa clave para la música sinfónica
Uno de los puntos más críticos señalados por las orquestas es la
desaparición de la línea de fortalecimiento de orquestas sinfónicas, un
programa que existía desde 2002 y que permitía garantizar el
funcionamiento y sostenibilidad de las agrupaciones regionales. De
acuerdo con Susana Palacios David, gerente de la Orquesta Sinfónica de
EAFIT, la eliminación de este programa representa un duro golpe para el
ecosistema musical del país.
“Llevamos más de 20 años trabajando bajo la modalidad de la línea de
fortalecimiento con el sistema sinfónico regional. Nos tomó por sorpresa
saber que desapareció”, afirmó
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Palacios. Según ella, aunque es
positivo que el Gobierno haya invertido en la formación musical de niños
y jóvenes, es igualmente importante garantizar espacios para que los
músicos puedan profesionalizarse y desempeñarse laboralmente en
orquestas.
El llamado al Ministerio de Cultura
Hasta el momento, el Ministerio de Cultura no ha dado una respuesta
oficial a la carta enviada por las orquestas el pasado 12 de febrero.
Sin embargo, se espera que la recién nombrada ministra Yannai Kadami se
pronuncie sobre el tema en cuanto asuma su cargo.
Mientras tanto, las orquestas hacen un
llamado urgente al Gobierno para buscar soluciones que garanticen su
sostenibilidad. Argumentan que la música sinfónica no solo es un
patrimonio cultural invaluable, sino que también juega un papel
fundamental en la construcción de ciudadanía y en la generación de
espacios de paz y cultura en el país.
La incertidumbre persiste y el futuro de las orquestas regionales está
en juego. La decisión del Ministerio de Cultura marcará el rumbo de la
música sinfónica en Colombia y definirá si el país seguirá apostando por
fortalecer su legado musical o permitirá que muchas de sus orquestas
desaparezcan por falta de apoyo.
300 familias
incomunicadas en Meta por desbordamiento del río Ariari

La creciente del río Ariari dejó
incomunicadas a cerca de 300 familias en las veredas de El Dorado y El
Castillo, en el departamento del Meta. La emergencia, que inició en la
madrugada del sábado, ha causado inundaciones, daños en viviendas y
pérdidas en cultivos y animales.
El alcalde de El Dorado, Óscar Olaya, confirmó que la fuerza del agua
destruyó la banca de la vía, aislando a las comunidades de La Isla, El
Edén, El Diamante, San José y Aguas Zarcas. “Estamos solicitando apoyo
urgente de la Unidad de Gestión del Riesgo para atender esta crisis”,
señaló.
El panorama es desolador. Según Carlos González, coordinador operativo
de la Defensa Civil en Meta, el agua arrasó cultivos de plátano, yuca,
maracuyá y maíz, además de causar la pérdida de animales de corral y
enseres de muchas familias. Mientras tanto, en El Castillo, el río ha
arrastrado troncos, rocas y cercas, dificultando el acceso incluso para
los botes de rescate.
Las autoridades han solicitado apoyo aéreo para evacuar a las familias,
pero el mal tiempo ha impedido los sobrevuelos de helicópteros. A pesar
de las dificultades, unidades de la Defensa Civil ya se encuentran en la
zona brindando asistencia y monitoreando la situación.
Ante el riesgo de nuevas crecientes, se recomienda a la comunidad evitar
las zonas inundadas y seguir las indicaciones de los organismos de
socorro. Para emergencias, están disponibles las líneas 311-808-4431 y
310-790-7501, operativas las 24 horas del día.
Crisis humanitaria
en Chocó: Procuraduría exige soluciones inmediatas
La Procuraduría General de la Nación
ha lanzado un llamado de urgencia para que las autoridades atiendan la
grave situación que enfrentan los habitantes de San José de Palmar,
Chocó. La crisis, provocada por el paro armado y el colapso de la vía
que conecta con Cartago, Valle del Cauca, ha
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generado un preocupante
desabastecimiento de alimentos y otros bienes esenciales para la
comunidad.
Desde 2022, la Procuraduría Provincial
de Instrucción de Cartago y la Personería impulsaron una acción popular
que fue respaldada por la justicia, asignando responsabilidades a las
gobernaciones de Chocó y Valle del Cauca. Sin embargo, según denuncia el
alcalde y la ciudadanía, estas no han cumplido con las medidas
ordenadas, afectando a aproximadamente 6.000 personas.

Ante la gravedad de la situación, el
ente de control convocó a los alcaldes del norte del Valle, quienes
manifestaron su solidaridad y anunciaron una colecta de ayuda
humanitaria.
Las gobernaciones han prometido el envío de maquinaria amarilla para
intervenir la vía afectada, pero la Procuraduría advierte que esta
medida es insuficiente, dado el deterioro vial y la crisis de orden
público. Además, el Ministerio Público subrayó que la respuesta
institucional hasta ahora ha sido ineficaz y desactualizada ante el
agravamiento del escenario.
La Procuraduría reiteró que no se trata solo de rehabilitar la vía, sino
de garantizar los derechos fundamentales de los habitantes, quienes
enfrentan confinamiento y una crisis humanitaria sin precedentes. Exige,
por ello, un compromiso real y una presencia constante de las
autoridades para resolver la situación.
Colombia y República
Dominicana fortalecen cooperación para proteger el ecosistema marino

En un esfuerzo por garantizar la
conservación de los océanos, Colombia y República Dominicana dieron un
paso importante en la planificación de áreas marinas protegidas. Durante
el taller internacional “Fortaleciendo Capacidades”, realizado el 19 y
20 de febrero en República Dominicana, expertos de ambos países
compartieron experiencias y estrategias para la gestión sostenible de la
Ecozona Beata.
La delegación colombiana estuvo
representada por especialistas de Parques Nacionales Naturales, el
Ministerio de Ambiente y el Instituto de Investigaciones Marinas y
Costeras (INVEMAR). Juntos, analizaron metodologías innovadoras y
exploraron oportunidades de cooperación para mejorar la conservación
marina en la región.
Uno de los principales logros del encuentro fue la socialización de la
experiencia colombiana en planificación y manejo de ecosistemas marinos,
lo que permitirá a República Dominicana adaptar herramientas exitosas a
su contexto local. Además, se estableció una hoja de ruta conjunta para
fortalecer la protección de la Cordillera Submarina Beata, un área clave
para la biodiversidad marina del Caribe.
Este esfuerzo binacional refuerza la importancia de la cooperación
internacional en la conservación de los océanos, especialmente en un
contexto donde el cambio climático y la actividad humana amenazan estos
ecosistemas. En los próximos meses, se espera que continúen los
encuentros y acciones conjuntas para consolidar el Plan de Manejo del
Santuario Orlando Jorge Mera, avanzando hacia un modelo de protección
más sólido y efectivo.
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