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Pero más allá de la discusión técnica sobre el metro, el alcalde aprovechó para poner sobre la mesa un tema igual de relevante: los programas que Bogotá ha tenido que asumir ante la falta de cofinanciación del Gobierno Nacional. Entre ellos, mencionó los subsidios de vivienda, el Programa de Alimentación Escolar (PAE), las becas universitarias y las ayudas para la población en situación de pobreza extrema.

"Este año Bogotá entregará la misma cantidad de subsidios de vivienda que todo el país", aseguró Galán, señalando que la Secretaría de Hábitat otorgará 16.000 subsidios para vivienda nueva y otros 4.000 para mejoramientos, superando ampliamente la cifra que tenía proyectada la Nación. Además, mencionó que el PAE, que no ha recibido giros del Ministerio de Hacienda, sigue garantizado para todos los estudiantes en Bogotá, con un incremento en las raciones calientes y nuevos comedores escolares.

En el sector educativo, mientras el Icetex dejó de ofrecer 8.000 créditos para estudiantes bogotanos, la administración distrital destinó recursos para entregar el mismo número de becas en 2024, con una meta de 13.000 para el próximo año. Asimismo, en materia de inclusión social, la ciudad está asumiendo la atención de 10.000 hogares en pobreza extrema que dejaron de recibir ayudas del Gobierno Nacional, con una inversión de 50.000 millones de pesos anuales.

Galán también denunció que la Nación retiró su apoyo a la atención de la primera infancia, dejando sin recursos a 11.000 niños que antes eran beneficiarios. Ante esto, la Alcaldía se propuso ampliar en 30.000 los cupos para garantizar la cobertura de estos menores. Además, destacó que el programa de transferencias para adultos mayores pasó de 38.000 a 75.000 beneficiarios en 2024 y que el monto de los giros aumentará de 130.000 a 150.000 pesos en 2025.

Finalmente, el alcalde hizo un llamado a la colaboración entre el Gobierno Nacional y el Distrito, asegurando que la gente está cansada de enfrentamientos y lo que quiere son soluciones. Además, invitó a Petro a visitar las obras del metro elevado y conocer de primera mano el avance del proyecto. "Más de 10.000 personas trabajan todos los días en esta megaobra, la más importante de infraestructura en Colombia", enfatizó.

A pesar del contundente mensaje de Galán, Petro insistió en sus críticas, asegurando que los estudios demuestran que el metro elevado aumentará los tiempos de viaje y cuestionando la viabilidad del proyecto. El rifirrafe sigue abierto, pero mientras la discusión política continúa, Bogotá sigue avanzando con sus propios recursos en proyectos clave para el bienestar de sus habitantes.

El RegioTram: Un sueño que avanza pese a los obstáculos

Salir y entrar de Bogotá en hora pico es una odisea que miles de ciudadanos enfrentan a diario. Desde hace cinco años, el RegioTram de Occidente se proyecta como una solución clave para mejorar la movilidad entre la capital y los municipios de la Sabana. Sin embargo, este ambicioso proyecto ferroviario ha encontrado en su camino innumerables trabas burocráticas y técnicas, retrasando su ejecución y aplazando la esperanza de los viajeros. Pese a ello, las autoridades aseguran que el tren avanza y que, aunque la meta inicial era 2026, la nueva fecha de operación está fijada para 2028.

Desde el inicio, la reubicación de redes de servicios públicos representó un desafío titánico. La Empresa Férrea Regional (EFR) y el consorcio chino encargado de la obra tuvieron que coordinar esfuerzos con empresas de cuatro municipios y con la misma Bogotá. Más recientemente, nuevos escollos han ralentizado el proceso, incluyendo la eliminación de la licencia ambiental y la identificación de ductos de combustible de Ecopetrol en el trazado del tren.

A pesar de estos contratiempos, hay avances tangibles. Los patios talleres El Corzo y ANI muestran progresos del 27 % y 100 %, respectivamente, mientras que los estudios y diseños principales están completados en un 84 %. Orlando Cely, gerente de la EFR, ha explicado que la construcción física de El Corzo está casi terminada, quedando pendientes trabajos complejos en los circuitos y mecanismos eléctricos.

Retrasos y nuevos desafíos

El cronograma inicial establecía que el RegioTram comenzaría operaciones en 2026, pero los retrasos han llevado a postergar su puesta en marcha hasta 2028. A pesar de esto, la Gobernación de Cundinamarca y el Gobierno Nacional han reiterado su compromiso con el proyecto. La semana pasada, el gobernador Jorge Rey anunció que en abril finalmente iniciarán las obras sobre el trazado férreo, después de que el año pasado se hiciera un anuncio similar sin que se materializara.

Uno de los principales problemas que el proyecto tuvo que sortear fue la licencia ambiental. La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) archivó la solicitud en mayo de 2023, argumentando que había falencias en la descripción del
 

proyecto y el análisis del impacto ambiental. Sin embargo, el 2 de mayo de 2024 se expidió el decreto 510, que eximió a proyectos ferroviarios con energías limpias de este requisito, permitiendo que el RegioTram siguiera adelante.

Otro obstáculo importante ha sido la reubicación de redes de servicios públicos. En el trazado de 40 kilómetros se identificaron 890 puntos con infraestructura de este tipo, lo que requirió la coordinación con 19 operadores de servicios en Bogotá, Facatativá, Madrid, Funza y Mosquera. Según Cely, este proceso ha avanzado en un 60 %, con la mayoría de los tramos en la Sabana ya despejados para instalar redes y traviesas.

El hallazgo de los ductos de Ecopetrol

Cuando parecía que todo estaba encaminado, apareció un nuevo reto: dos tubos de Ecopetrol que transportan combustible al Aeropuerto El Dorado están ubicados a escasos metros del trazado del RegioTram, específicamente en el tramo entre Fontibón y la Avenida Ciudad de Cali. La proximidad de esta infraestructura a un sistema ferroviario eléctrico representa un riesgo significativo.

Inicialmente, se contempló reubicar los tubos, pero el alto costo y el impacto social lo hicieron inviable. En su lugar, se optó por enterrar los ductos a mayor profundidad mediante perforación hidráulica dirigida (PHD), una tecnología que evita excavaciones a cielo abierto. Esta obra costará cerca de $290.000 millones, que serán asumidos por Cenit, filial de Ecopetrol, con un cronograma que prevé su finalización en el primer trimestre de 2026.

Incertidumbre financiera

Un nuevo problema se ha sumado a la lista: el Gobierno Nacional anunció el aplazamiento de la transferencia de $380.000 millones destinados a proyectos de infraestructura, incluyendo el RegioTram. Aunque esta decisión no afecta el inicio de las obras, ya que los recursos de vigencias pasadas están asegurados, la Gobernación de Cundinamarca ha iniciado conversaciones con el Ministerio de Hacienda para garantizar que el giro de estos fondos se haga efectivo antes de 2026.

Pese a los obstáculos, los esfuerzos de autoridades y entidades involucradas siguen firmes en la meta de hacer realidad el RegioTram. Detrás de este proyecto no solo hay cifras y estudios, sino la esperanza de miles de habitantes de la Sabana que sueñan con un transporte eficiente, seguro y sostenible que les facilite su vida diaria.

Avanza la construcción de los tres puentes en la avenida El Rincón con calle 127

La movilidad en el noroccidente de Bogotá está a punto de dar un giro significativo con la construcción de tres nuevos puentes vehiculares en la intersección de la avenida El Rincón con la calle 127 y la avenida Boyacá. Con un avance del 88,38 %, la obra beneficiará a más de 1,2 millones de ciudadanos en la localidad de Suba, optimizando el flujo vehicular en un sector clave de la capital.

Recibido por la administración del alcalde Carlos Fernando Galán en enero de 2024 con un 65,25 % de avance, el proyecto contempla la construcción de dos puentes rectos y uno curvo. Su función principal será facilitar la conexión entre la avenida El Rincón y la calle 127 sin necesidad de incorporarse a la avenida Boyacá, permitiendo un tránsito más fluido en sentido nororiente-noroccidente.

La entrega de los puentes está prevista para marzo de 2025, mientras que la totalidad de la obra, incluyendo la adecuación vial, estará lista en el segundo trimestre del año. Este proyecto forma parte del acuerdo de Valorización 523 de 2013 y ha sido una prioridad para la actual administración en su compromiso por mejorar la infraestructura vial de la ciudad.

Durante una reciente inspección, Orlando Molano, director del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), supervisó el vaciado de concreto en el ramal J, una de las estructuras clave de la obra. "Siempre lo hemos dicho: el alcalde Carlos Fernando Galán nos ha pedido saldar la deuda histórica con estos proyectos. Estamos fundiendo más de 180 m3 de concreto para conectar el noroccidente con el norte de Bogotá a través de este puente", destacó Molano.

Además de los beneficios en movilidad, el proyecto contempla más de 54.000 metros cuadrados de espacio público y 2,1 kilómetros de ciclorruta, promoviendo un entorno más amigable para peatones y ciclistas. Con una extensión total de 2,35 kilómetros, se espera una significativa reducción en la congestión vehicular y una mejora en la calidad de vida de los bogotanos.

Mientras continúa la construcción, el IDU ha implementado un Plan de Manejo de Tránsito con rutas alternas para mitigar el impacto en la movilidad. Se prevé que los cierres y desvíos se mantengan hasta marzo de 2025. Con un costo total de 294.438 millones de pesos, esta obra representa un paso crucial en la modernización de la infraestructura vial de la capital.

Clausuran mina ilegal de carbón que contaminaba el río Bogotá

Las autoridades ambientales de Cundinamarca han dado un nuevo golpe contra la explotación ilegal de recursos naturales. La Corporación Autónoma Regional (CAR) confirmó el cierre de una mina de carbón en el municipio de Guatavita, cuya operación sin permisos estaba afectando la cuenca alta del río Bogotá.

El hallazgo tuvo lugar en la vereda Santamaría y/o Buenavista, donde inspectores de la CAR evidenciaron que se estaban realizando actividades mineras sin los debidos permisos. Además de la explotación del carbón, se identificaron labores de mantenimiento como ventilación y desagüe de la bocamina, sin cumplir con las precauciones medioambientales exigidas.

De acuerdo con la CAR, el área intervenida se encuentra en una zona excluida para la actividad minera, según lo estipula la Resolución 2002 de 2016, que regula el uso del suelo en la sabana de Bogotá. Por ello, se impusieron medidas preventivas para frenar la contaminación y evitar mayores daños al ecosistema.

"Nuestro compromiso es proteger los recursos naturales. Con esta medida, salvaguardamos el recurso hídrico y el suelo de la región", afirmó Josué Camacho, director regional de la CAR en Almeidas y Guatavita.

Las autoridades hacen un llamado a la comunidad para denunciar cualquier actividad ilegal que ponga en riesgo el medioambiente. Las denuncias pueden realizarse a través del portal web de la CAR o en sus oficinas regionales.

Con esta acción, se busca no solo frenar la explotación ilegal de recursos, sino también generar conciencia sobre la importancia de preservar los ecosistemas que abastecen de agua y vida a la región.

Galán le responde a Petro: “Bogotá está asumiendo lo que el Gobierno Nacional abandonó”

En un nuevo episodio de confrontación entre el presidente Gustavo Petro y el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, el mandatario distrital salió en defensa del metro elevado y respondió a las críticas del jefe de Estado. Pero no solo eso, también dejó en evidencia cómo la ciudad ha tenido que asumir varios programas que el Gobierno Nacional ha dejado de financiar.

Durante los últimos días, Petro ha insistido en que la primera línea del metro no es la mejor opción para Bogotá y ha reiterado su apoyo al proyecto subterráneo que impulsó en su alcaldía. Sin embargo, Galán, a través de un video, desmintió las afirmaciones del presidente y recalcó que el metro elevado es una realidad, con un avance del 48,24 %, y que traerá beneficios tangibles para la movilidad de la capital.