EL SENDERO DEL DHARMA

Por: Gongpa Rabsel Rinpoché
Lama Sammasati para Latinoamérica

El Arte de Re-Escribir el Final: Una Perspectiva del Budsismo Sammasati

"No puedes volver atrás y cambiar el principio, pero puedes comenzar dónde estás y cambiar el final."

Análisis desde el punto de vista del Budhismo Sammasati:

Este proverbio resuena profundamente con las enseñanzas centrales del Budhismo Sammasati, una tradición que enfatiza la atención plena, la sabiduría y la compasión como herramientas para la transformación personal.

"No puedes volver atrás y cambiar el principio":

Esta primera parte nos confronta con la naturaleza inmutable del pasado. Lo que ha ocurrido, ya es. No podemos retroceder el tiempo para alterar nuestras acciones, decisiones o las circunstancias que nos han traído al presente. El pasado es un hecho consumado, una narrativa que ya ha sido escrita.

Desde la perspectiva del Budismo Sammasati, esta realidad se relaciona con el concepto de karma. Nuestras acciones pasadas, tanto virtuosas como no virtuosas, han creado las condiciones que experimentamos en el presente. No podemos deshacer el karma pasado, pero tenemos la capacidad de elegir cómo respondemos a él en el presente. Esta respuesta es crucial, ya que moldea nuestro futuro.

"Pero puedes comenzar dónde estás y cambiar el final":

Esta segunda parte del proverbio ofrece un mensaje de esperanza y empoderamiento. Aunque no podemos cambiar el pasado, tenemos la capacidad de influir en el futuro. El presente, este mismo instante, es el punto de partida para crear un nuevo final, una nueva narrativa para nuestra vida.

El Budhismo Sammasati enfatiza la importancia del momento presente. Al estar plenamente presentes y conscientes de nuestras acciones, pensamientos y emociones, podemos tomar decisiones más sabias y compasivas. Podemos cultivar cualidades como la atención plena (Sati), la bondad amorosa (Metta) y la sabiduría (Pañña) para transformar nuestra vida y crear un futuro más positivo.

Implicaciones prácticas:

Este pensamiento nos invita a:

* Aceptar el pasado: Dejar de lamentarnos por lo que no podemos cambiar y aceptar que el pasado es una parte integral de nuestra historia personal. No podemos reescribir el pasado, pero podemos aprender de él.

* Vivir el presente: Enfocarnos en el aquí y ahora, en lugar de preocuparnos por el futuro o rumiar el pasado. El presente es donde reside el poder de elegir y crear.

* Asumir la responsabilidad: Reconocer que nuestras acciones en el presente tienen un impacto directo en el futuro. Somos los arquitectos de nuestro propio destino.

* Cultivar el cambio: Utilizar las herramientas del Budhismo Sammasati, como la meditación y la atención plena, para transformar nuestra mente y nuestras acciones. Al cambiar nuestra mente, cambiamos nuestra realidad.
 

En resumen:

Este proverbio nos recuerda que, aunque no podemos cambiar el pasado, tenemos el

poder de crear un futuro mejor al vivir conscientemente en el presente y cultivar cualidades positivas. El Budhismo Sammasati nos proporciona las herramientas y la guía para llevar a cabo esta transformación personal.

Tashi Delek para todos y todas.

¡EL RICO EPULÓN Y LA LUCHA DE CLASES!

Por: Álvaro Ramírez González
alragonz@yahoo.es

Estaba yo en Shanghai China hace 4 años, e indagaba por el enorme capital que produjo ese descomunal desarrollo en ese país.

“Primero llegó el capital Inglés, y después el capital norteamericano”.

“Pero hoy, estamos orgullosos de tener 95 millones de motorcitos Chinos “, me contó el amable economista Chino que hablaba conmigo.

¿Que son los motorcitos pregunté?

Son empresarios Chinos que ya tienen un patrimonio de US$10 millones o más y que generan 50 empleos o más en nuestra economía.

Son ya 95 millones.

En China los ven y los valoran como los motorcitos de la economía China.

Y están orgullosos de que año a año, lleguen más motorcitos a empujar esa poderosa economía.

Petro los llama “el rico epulón”.

¡Y los desprecia!

Y pretende enfrentarlos a los trabajadores.

¿Por qué ese trato tan despreciable con quien pone todo su patrimonio y el de su familia y su capacidad de endeudamiento al servicio de una empresa, que va a generar cientos o miles de empleos?

¿Que hay de malo allí?

Epulón es un personaje de la Biblia y el Evangelio de San Lucas.

Epulón era un rico que comía mucho y atesoraba igual. Nada más.

El concepto de rico ha evolucionado mucho, en el mundo actual.

Primero, los grandes magnates del Mundo como Bill Gates, han donado ya casi el 100% de la fortuna que se han ganado, a fundaciones de caridad, que atienden causas como el Sida y el hambre en el planeta.

Mucha parte del detenimiento en el crecimiento de este mal obedece a estos millonarios fondos.

Esa fortuna se ha reproducido de nuevo, y continúa donando enormes sumas anuales.

Casi todos los otros magnates, han donado además continuamente y anunciado, que van a donar toda su elevada fortuna, a las mismas fundaciones y causas humanitarias y sólo le dejarán a sus hijos unas sumas modestas para que vivan de igual manera.

Ese cuento pendejo de enfrentar a empleadores y empleados es una fórmula rancia y fracasada del comunismo.

Empleadores y empleados deben ser aliados.

Nada más claro en economía.

Son dos piezas claves en el proceso productivo.