|

Fundado el 3 Abril de 2020
Publisher:
Zahur Klemath
Zapata

Dé
click para
bajar el APP
de
Noticias5
Las opiniones expresadas por
los columnista son de su exlusiva responsabilidad
y
no comprometen el pensamiento de Noticias5.
 
Director: Zahur
Klemath Zapata
Gerente: Laurie
Agront
Gerente
Operativo: Alba L.
Arenas. V.
Editor:
Faver Alvarez
Redacción: Ramón
Valderrama
Deportes: Edwin Ballesteros
Diagramación:
José Mejía
Soporte Técnico: Aurooj
Ali Khan
Colaboradores: Jotamario
Arbeláez,
Gustavo
Alvarez Gardeazábal, Teresa Pardo, Edgar Cabezas,
Guillermo Navarrete, Ricardo Castellanos, Iván Pulido,
Álvaro Ramírez González, Otoniel Parra
Arias, Rubén Darío Varela Hurtado.

|
|
Galán propone
mayor presencia del Ejército en San Bernardo ante ola de
atentados

El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, admitió la crisis
de seguridad en el barrio San Bernardo y sugirió que una mayor
presencia del Ejército podría contribuir a mejorar la situación.
La propuesta surge tras el quinto atentado con granada en menos
de un año, que dejó tres personas heridas la noche del 25 de
marzo.
San Bernardo se ha convertido en el epicentro de una guerra
entre bandas dedicadas al microtráfico, dejando hasta ahora un
saldo de cuatro muertos y 29 heridos. Horas antes del último
ataque, Galán había anunciado los resultados de un operativo
policial en la zona, lo que refuerza la hipótesis de que estos
atentados son represalias de las estructuras criminales.
En una rueda de prensa, el mandatario distrital enfatizó la
necesidad de un trabajo articulado entre la Policía, la Fiscalía
y la Brigada XIII del Ejército. “Sería muy positivo mayor
presencia del Ejército. Ellos están a menos de tres cuadras del
Batallón de Guardia Presidencial, podrían ayudar en tareas de
vigilancia sin reemplazar a la Policía Metropolitana”, explicó.
La idea de reforzar la seguridad con militares ha sido tema de
discusión en varias administraciones. En 2021, el gremio de
comerciantes Fenalco pidió la militarización de la ciudad ante
el incremento de robos y extorsiones. Sin embargo, la entonces
alcaldesa Claudia López rechazó la propuesta y optó por
patrullajes conjuntos entre Policía Militar y la Policía
Metropolitana.
Hoy, con una administración distinta, el dilema sigue siendo el
mismo: la ciudad tiene un déficit de uniformados. Actualmente,
Bogotá cuenta con 16.656 policías, lo que equivale a un agente
por cada 470 habitantes, cuando el estándar internacional
sugiere uno por cada 300.
El secretario de Seguridad de Bogotá explicó que la presencia
militar ya forma parte del plan de seguridad distrital desde el
inicio del mandato. “La estrategia de seguridad urbana involucra
a la Policía, la Brigada 13 del Ejército, la Fiscalía y la
Secretaría de Seguridad. Su acción coordinada busca recuperar el
control del espacio público y reducir vulnerabilidades”,
aseguró.
A pesar de estas declaraciones, expertos como el exsubsecretario
de Seguridad, Andrés Nieto, advierten que las limitaciones
legales impiden la militarización en la ciudad. Según él, la
asistencia militar solo es viable en situaciones de
excepcionalidad, lo que no aplica en el contexto actual de
Bogotá.
Mientras el debate sigue abierto, los habitantes de San Bernardo
continúan viviendo bajo el temor de nuevos ataques. La demanda
es clara: soluciones efectivas y a largo plazo que garanticen la
seguridad en este convulsionado sector de la capital.
Puentes de la
calle 127 con avenida Boyacá entrarán en funcionamiento en los
próximos días

Los bogotanos están cada vez más cerca de ver en funcionamiento
la nueva intersección de la calle 127 con la avenida Boyacá.
Durante un recorrido de verificación, el director del Instituto
de Desarrollo Urbano (IDU), Orlando Molano, aseguró que los
trabajos finales avanzan a buen ritmo y que la entrega de los
puentes vehiculares se hará en los próximos días.
Con esta obra, que incluye tres nuevos puentes vehiculares—dos
rectos de 260 metros y uno curvo de 281 metros—se beneficiará a
más de un millón doscientas mil personas de la localidad de Suba
y a quienes transitan por este corredor del noroccidente de la
ciudad. La intersección busca mejorar la movilidad en un punto
|
|
clave de la capital, donde el
tráfico suele ser un dolor de cabeza para conductores y
peatones.
Molano destacó el esfuerzo del
IDU y del contratista para acelerar la ejecución del proyecto.
"La instrucción del alcalde fue clara: trabajar sin descanso,
incluyendo sábados, domingos y festivos, para cumplir con los
tiempos establecidos. Nos comprometimos a entregar estos puentes
en marzo, y lo vamos a lograr", afirmó el funcionario.
Durante el puente festivo de San José, más de 600 personas
trabajaron sin pausa para completar los detalles finales. Además
de los puentes, el proyecto contempla la construcción de 54.000
metros cuadrados de espacio público y 2,3 kilómetros de
ciclorruta, elementos que, según el cronograma, serán entregados
entre mayo y junio de este año.
La comunidad ha seguido de cerca el desarrollo de estas obras,
que prometen un gran alivio en la movilidad del sector.
"Esperamos que con estos puentes se reduzcan los trancones y
mejore la circulación en esta zona", comentó un residente de
Suba.
Con los trabajos en su etapa final, los habitantes de la ciudad
pronto podrán hacer uso de esta nueva infraestructura, que
contribuirá a una mejor conectividad y seguridad vial en uno de
los corredores más transitados de Bogotá.
Disminuyen las
inmovilizaciones de vehículos en Bogotá

En Bogotá, la cantidad de vehículos inmovilizados y trasladados
a patios ha disminuido un 22,8 % en el último año, según un
informe de la Personería Distrital. Esta reducción ha generado
interrogantes sobre las razones detrás de la tendencia y el
impacto en las finanzas de la ciudad.
De acuerdo con el estudio, en 2023 el promedio mensual de
vehículos llevados a patios era de 8.524, mientras que en 2024
la cifra cayó a 6.577. Esto ha repercutido en los ingresos
obtenidos por concepto de sanciones, los cuales pasaron de
41.228 millones de pesos en 2023 a 36.778 millones en 2024, lo
que representa una disminución del 10,79 %.
Las inmovilizaciones de vehículos en la capital suelen estar
relacionadas con infracciones como estacionamiento indebido,
falta de revisión técnico-mecánica, ausencia de SOAT, tránsito
en zonas restringidas, entre otras. En este sentido, la
Secretaría de Movilidad ha intensificado los operativos de
control con el objetivo de recuperar el espacio público y
mejorar la movilidad en la ciudad.
Las localidades con mayor número de inmovilizaciones y traslados
a patios son Fontibón, Kennedy y Engativá, lo que coincide con
las zonas donde están ubicados los patios de retención. En
Fontibón se registraron 14.273 casos en 2024, en Kennedy 9.918 y
en Engativá 8.573. Además, el estudio señala que las
inmovilizaciones ocurren con mayor frecuencia en dos franjas
horarias: entre las 9:00 a. m. y la 1:00 p. m., y entre las 4:00
p. m. y las 7:00 p. m., principalmente en días hábiles.
Los motociclistas encabezan la lista de conductores sancionados,
representando el 56 % de las inmovilizaciones. Le siguen los
vehículos livianos, con un 28,8 %, y en menor medida los
automóviles, camiones y minivans, que acumulan un 10,9 %. En
contraste, los automotores pesados son los menos afectados, con
apenas un 1,3 % de las sanciones.
El personero de Bogotá, Andrés Castro, indicó que aún no se han
determinado con certeza las razones de la reducción de
inmovilizaciones. No obstante, mencionó que una posible causa es
el cambio en la normativa vigente, que ha eliminado algunas
causales de inmovilización.
“Este estudio es solo una primera fase para entender el panorama
actual. En una segunda etapa, profundizaremos en las razones
detrás de esta tendencia y su impacto en las políticas de
movilidad del distrito”, afirmó Castro.
Por ahora, la Secretaría de Movilidad continuará implementando
operativos y estrategias para garantizar el cumplimiento de las
normas de tránsito en la ciudad. La disminución de las
inmovilizaciones podría ser una señal de mayor conciencia entre
los conductores o el resultado de ajustes en la legislación,
pero las autoridades seguirán evaluando el fenómeno para
comprender sus implicaciones a largo plazo.
|
|
Otra noche de terror en San Bernardo:
Quinto atentado con granada en menos de un año

La
tranquilidad de la noche bogotana se vio interrumpida nuevamente en el
barrio San Bernardo, en la localidad de Santa Fe. El estallido de una
granada de fragmentación dejó a tres personas heridas y reavivó el temor
de los residentes, quienes han sido testigos de una serie de atentados
similares en los últimos meses.
El más reciente hecho ocurrió el martes 25 de marzo en la carrera 11A
con calle 2. Según el reporte de la Policía Metropolitana de Bogotá, dos
sujetos a bordo de una motocicleta lanzaron el explosivo contra tres
personas que se encontraban en la vía pública. Aunque los heridos fueron
trasladados de inmediato a centros asistenciales, el incidente ha
generado un fuerte cuestionamiento sobre la seguridad en la zona.
El comandante de la Policía Metropolitana, brigadier general Giovanni
Cristancho Zambrano, expresó su preocupación por el lugar del ataque.
“Las otras granadas fueron lanzadas en puntos donde sabíamos que había
conflicto, pero en este lugar no habían sido lanzadas antes”, señaló.
Las autoridades investigan si este nuevo atentado es una represalia por
los operativos recientes contra bandas dedicadas al tráfico de
estupefacientes, que han dejado al menos 15 capturas en la última
semana.
Sin embargo, para los habitantes de San Bernardo, la violencia con
explosivos no es nueva. El 13 de marzo, una granada detonó en la carrera
décima con calle 3, dejando un saldo trágico de tres muertos y diez
heridos. Las autoridades atribuyeron este ataque a la disputa entre ‘los
Costeños’ y ‘los Venecos’, dos bandas que se disputan el control del
microtráfico en la zona.
El 23 de febrero, otro ataque sacudió el sector cuando un artefacto
explosivo fue detonado en la carrera décima con calle 6, hiriendo a tres
personas. Un extranjero fue capturado poco después, señalado como el
responsable del atentado. Días antes, el 18 de febrero, otra explosión
en la carrera décima con calle 5 dejó una mujer muerta y ocho heridos,
en un acto dirigido contra habitantes de calle.
El primer antecedente de esta ola de violencia ocurrió el 27 de julio de
2024, cuando una granada fue arrojada en plena vía pública, aunque en
esa ocasión no llegó a detonar. Desde entonces, el barrio ha vivido bajo
la sombra del miedo.
A pesar de la presencia policial y de los recientes operativos que han
resultado en la incautación de más de 1.000 dosis de estupefacientes,
los residentes siguen sintiéndose desprotegidos. La comunidad exige
medidas más contundentes que permitan devolver la seguridad a este
sector de Bogotá, donde cada explosión deja cicatrices imborrables y
refuerza la sensación de abandono por parte de las autoridades.
|